1. Excusitis. La «excusitis» es la enfermedad del fracaso. Las excusas no son otra cosa que mentiras que nos decimos a nosotros mismos. Y el gran problema de buscar excusas es que si uno las busca, siempre las encuentra. Las justificaciones vienen al por mayor. Si quieres tener éxito, hazte cargo de ti mismo.
2. Victimitis. Es creer que el mundo está contra uno. Es creer que existe una conspiración para que uno no consiga sus metas y objetivos. Es creer que los demás consiguen las cosas por enchufe, o porque han nacido en un tipo de familia, o porque han tenido cierta educación determinada. Se puede ser víctima o conseguir resultados, pero no las dos cosas al mismo tiempo.
3. Quejiquitis. Quejarse puede hacernos sentir mejor, pero no soluciona nada. Quejarse pone el foco en el problema y nunca en la solución. Sí, hay injusticias, deslealtades, traiciones, crisis y otras muchas cosas. Acostúmbrate a ello. A menudo, no se trata de eliminar obstáculos sino de cómo bordearlos para llegar a destino.
4. Culpabilitis. Es otra versión más de la no-responsabilidad. Echarle el muerto a la crisis, al gobierno, a la suerte (mala), a los padres, al jefe, al clima o a cualquier otro factor. Como nos recuerda el doctor Wayne W. Dyer: «Culpar siempre es una pérdida de tiempo. Sin importar cuántos fallos encuentre, por más que culpe, eso no le cambiará a usted».
Del libro: Tu futuro es hoy