Yo no era el atleta más talentoso o con la mejor coordinación del equipo, pero siempre jugaba con gran pasión. En el tercer año, tuve que compartir la posición de guardia derecho con otro jugador. Por lo general el otro comenzaba los juegos y yo permanecía mucho tiempo en la banca. Pero yo siempre estaba dispuesto y, aunque rara vez comenzaba los juegos, casi siempre jugaba. «Un día en la práctica, las cosas no iban bien. Todo mundo estaba apenas sobrellevando el entrenamiento. Yo golpeaba duro, pero pensaba en aflojar el paso. Entonces el entrenador nos llamó fuera del campo y nos reunió en la línea de banda. «Aún puedo verlo sentado en la banca, y aún puedo oír su voz. Dijo, ‘¿A cuántos de ustedes les interesa ganar el juego del viernes por la noche?’ «Cuarenta y un manos se levantaron. «Pues les tengo malas noticias», dijo. «Estar interesado no es suficiente. Muchas personas están interesadas en muchas cosas. A mí me interesa ganar el Maratón de Boston. ¿Pero saben qué? Nunca lo voy a ganar. No estoy comprometido a ganarlo. No estoy apasionado por ganarlo. Eso es lo que se requiere: ¡pasión y compromiso! Y ustedes están tan lejos de la pasión y del compromiso como cualquier otra persona. De hecho, hay un solo jugador que demuestra algo de pasión, y es Jenkins. «Pero les voy a decir algo», continuó. «Yo estoy apasionado con el juego del viernes por la noche. Y estoy tan apasionado que les voy a hacer una promesa. Todos los que entren al campo ese día tendrán pasión y compromiso. «En este momento sólo tengo a una persona que iniciará el juego: Jenkins. No pondré a jugar a nadie que no tenga pasión por ganar. Si Jenkins entra solo al campo, que así sea. Uno con pasión es mejor que cuarenta con un mero interés.» «Y después de eso, salió del campo y su asistente dirigió el resto de la práctica. «El viernes siguiente yo inicié el juego, y fue uno de los mejores de la temporada. Ganamos 35 a 6. Después de eso, yo inicié todos los juegos. Me grabé esas palabras en el tercer y el cuarto años.
Del libro: las 7 claves del éxito de Disney
