El legendario Phil Jackson, el exentrenador de la NBA, lo llama «gente de grupo». Eso contituyó la base de si extraordinaria carrera como técnico. En sus primeras seis temporadas en la NBA, Michael Jordan fue de largo el mejor jugador de la liga, pero no ganó el titulo.
Un gran jugador por sí solo puede triunfar hasta cierto punto. No importa que su uno contra uno quite el aliento: si psicológicamente no está sincronizado con los demás, el equipo nunca alcanzará la armonía necesaria para ganar un campeonato.
Del Libro: Legacy

